- Novela
- 160 páginas
- 14 cm x 22 cm
- Encuadernación rústica
Aunque intente ignorarlo, Irene está desapareciendo. Los sensores no la detectan, las palabras que escribe se borran, quiere agarrar una copa y su mano la atraviesa. El primero en notarlo es Lázuli, su pavo real. Pronto también lo perciben los demás animales de apoyo emocional que habitan su mundo: canguros, cebras, dragones de Komodo. Desaparecer es un efecto colateral muy poco común de la soledad profunda, y ella está incrédula. No porque parezca incurable, sino porque a Irene le encanta su soledad. ¿Cómo pudo volverse en su contra? Con el tiempo que se le termina, Irene busca dejar de desvanecerse sin renunciar a la soledad que elige